Hombre acaba con hongos en los pulmones por oler sus calcetines
Aunque sobre hábitos y gustos no hay nada escrito, el sentido común dicta que el límite debe ponerse cuando suponen un riesgo para la salud, propia y ajena. Dicho esto, entre la multiplicidad de parafilias -o gratificaciones placenteras alternativas- que existen está de gozar con el olor de la ropa interior usada. Una práctica que igual no todos entienden pero que, teóricamente, no entraña riesgos. El caso de Peng, un hombre chino de 37 años, es sin embargo una excepción, según cuenta el medio especializado Science Alert. La extraña costumbre que había adoptado era la de olisquear sus propios calcetines desgastados y sucios cada día al finalizar su jornada laboral. Un día empezó a sufrir graves dolores en el pecho, sensación de opresión al respirar y tos. Peng acudió entonces a su hospital de referencia de Zhangzhou, en la provincia china de Fujian. Inicialmente se sospechó una neumonía, pero los síntomas continuaron sin mejoría alguna pese al tratamiento por lo que se continuó con la